La tarde, posiblemente ventosa y fría, había caído. Por la avenida de Madrid los últimos viandantes caminaban deprisa huyendo del cierzo matarile y de la España tediosa con olor a Nodo y crisantemos. Los amigos, unos cuantos, nos cobijamos en el interior de casa Emilio. Durante la cena se hablaba de fútbol, de romances idílicos, de algún poeta loco y de esas otras zarandajas que uno manipulaba, en aquellos años para escapar del colega de gris que sentado en una de las mesas exteriores, vigilaba a los clientes, casi todos camioneros y "rojeras" de turno..
(J.A. Labordeta)
INGREDIENTES:
4 personas
500 gr. de calabacín
500 gr. de patatas
2 pimientos
250 gr. de tomates
50 gr. de bonito en escabeche
un huevo
PROCEDIMIENTO:
Trocearemos el calabacín y la patata como para hacer tortilla.
Cortaremos los pimientos y los tomates en cuadrados.
Freiremos cada producto por separado, dándole a cada su friura específica.
Después de escurrirlos bien, los juntaremos y dejaremos de 5 a 10 minutos, para que se terminen de hacer y se mezclen los sabores.
Añadiremos el bonito en escabeche y un huevo crudo, revolveremos el conjunto y acabaremos de hacer.
Que nostalgia al leerle!!!! El recuerdo de la fritada, de Casa Emilio, de aquel Café Madrid de la esquina, donde mi padre solía quedar con mis tíos cuando venían a Zaragoza para que no se perdiesen en la entrada... Tiempos felices que ya no volverán!!! De todo aquello tan sólo me queda Casa Emilio... Gracias por refrescarme la memoria.... Un saludo.
ResponderEliminarGloria.
Este plato es un clásico en mi casa. Lo hace mi madre en Zaragoza. Lo hago yo en Logroño. Y mis hijos lo adoran y esperó lo hagan allá donde estén cuando crezcan. Gracias.
ResponderEliminarLa fritada de mi pueblo es más humilde, patatas, calabacín y cebolla, receta veraniega que gusta a todo el mundo y que también pasa de abuelas a nietas en un plis porque es sencilla de preparar.
ResponderEliminarMañana lo hare
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