Este plato que recibe varios nombres, es un clásico de aprovechamiento de alimentos de la cocina aragonesa, recibe varios nombres: huevos tontos, engañamaridos, parece ser que cuando volvían los maridos a casa a comer, y esperaban unas croquetas de carne, les daban ...pan, también he oído el nombre de huevos en creciente, muy propios de las vigilias de la semana santa, este clásico de la cocina aragonesa me parece que tiene también alguna réplica en distintas cocinas españolas, como casi todos los platos de aprovechamiento.
Ya haremos algún plato en combinación con otros alimentos, por ejemplo con bacalao, muy tradicional en el bajo Aragón.
Mojar el pan con agua, la suficiente para que quede bien empapado pero no tanta que rezume. Poner los huevos, sal, los ajos muy picados y si se quiere algo de perejil también muy picado.Remover todo enérgicamente con tenedor, hasta obtener una mezcla consistente y homogénea.Poner aceite a calentar y cuando empieza a humear, hacer porciones pequeñas de la masa con dos cucharas y freírlas hasta dorar. Quedan dorados por fuera y esponjosos por dentro, con lo cual mezclados con guisos que lleven caldo, toman toda la sustancia y el sabor.
Mojar el pan con agua, la suficiente para que quede bien empapado pero no tanta que rezume. Poner los huevos, sal, los ajos muy picados y si se quiere algo de perejil también muy picado.Remover todo enérgicamente con tenedor, hasta obtener una mezcla consistente y homogénea.Poner aceite a calentar y cuando empieza a humear, hacer porciones pequeñas de la masa con dos cucharas y freírlas hasta dorar. Quedan dorados por fuera y esponjosos por dentro, con lo cual mezclados con guisos que lleven caldo, toman toda la sustancia y el sabor.
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